jueves, 21 de agosto de 2025

APARATOS INDISPENSABLES PARA LA PRÁCTICA DEL SANDA

En el siguiente artículo se muestran una serie de aparatos que son indispensables para la práctica de cualquier deporte de contacto y en concreto para la modalidad de Sanda.

1. Saco de boxeo. Quizá el elemento más básico y el que mas juego da, los hay de diferentes tamaños y formas pero en esencia sirven para el mismo trabajo, golpearlo. Mejora fuerza, resistencia y precisión. Ayuda a practicar combinaciones de golpes. Lo más importante del trabajo con saco es que no necesitas de compañero para utilizarlo.

2. Muñeco de lucha. Facilita el entrenamiento de proyecciones en solitario, además de que podemos hacerle cientos de proyecciones sin que se queje o lesione. 

3. Peras de boxeo (peras locas y de velocidad) Pera de velocidad: Mejora la coordinación, el ritmo y la rapidez de manos. Pera loca: Desarrolla reflejos, precisión, desplazamientos y esquivas, ya que se mueve en distintas direcciones. 

4. Comba para saltar, indispensable para el acondicionamiento físico. Mejora resistencia cardiovascular, coordinación, velocidad de pies y agilidad. 

5. Protecciones y vendas. Nos protegen durante el entrenamiento, esenciales para evitar lesiones propias o del compañero.

6. Espejos. Permiten observar la técnica y corregir la postura y los movimientos. 

7. Manoplas (pao, escudo, mitts). Sirven para mejorar precisión, reflejos y combinaciones de golpes. Puedes ver un artículo sobre estas en el siguiente enlace: LAOJIAWUSHU: MANOPLEAME

8. Cronómetro. Ayuda a trabajar con la estructura de rounds y descansos, simulando una pelea real. Importante que sea programable en el tiempo en función de la temporada y de las necesidades del practicante. 

Como elemento no indispensable pero si importante sobre todo en el caso de competidores, tenemos el "Lei Tai", que es la plataforma elevada utilizada en las competiciones de Sanda. Esta facilita la práctica asimilada a la competición al marcar las medidas y las salidas del la misma. 

lunes, 18 de agosto de 2025

MOTIVACIÓN

Esta entrada que os traigo hoy era mucho más extensa, muy personal, decidí sintetizarla para hacerla menos tediosa, muchas cosas se han quedado en el tintero pero lo esencial lo tenéis en estas líneas.

La motivación: mi motor en la vida y en las artes marciales

En esta ocasión no vengo a hablarte de artes marciales concretamente, hoy quiero hablarte de algo que sin saberlo ha sido el hilo conductor de mi vida: la motivación.

Un estudiante “del montón” que decidió cambiar

Nunca fui especialmente bueno ni en el deporte ni en los estudios.
Lo poco que he conseguido ha sido fruto de la constancia… y, tal vez, de un poco de suerte.

En la EGB apenas pasaba con un “suficiente”. No era cuestión de capacidad, sino de un cóctel de factores: entorno, clases poco inspiradoras y, sobre todo, una gran desmotivación.
Comencé BUP por accidente (yo quería hacer FP) y terminé el primer curso con cuatro suspensos. A falta de motivación, me convertí en lo que podría describirse como un “gilí... integral”.

Pero todo empezó a cambiar cuando, al pasar a FP Administrativo, descubrí que podía sacar buenas notas. Mi forma de ser evolucionó, y aunque seguía siendo un cabezón, empecé a caminar por otro sendero. Luego probé con la rama de informática… pero decidí dedicarme a dar clases de Kung Fu (tenía muchos pájaros en la cabeza).

A los 25 años, ya con otra mentalidad y gracias al apoyo de mi pareja, volví a estudiar: acceso a la universidad y después Trabajo Social, carrera que saqué con una media de notable. Nadie hubiera apostado por aquel chaval de 14 años que apenas aprobaba.

Aprender, aunque cueste

Con el inglés, la historia fue parecida. Siempre lo aprobé “por los pelos”, pero un día decidí que eso debía cambiar. Pasé siete años en la Escuela de Idiomas, hasta alcanzar el C1-1.
No seguí más, pero hoy puedo mantener conversaciones, y lo más importante: he perdido el miedo a equivocarme. Prefiero hablar mal pero comunicarme, que callarme por miedo.

En paralelo, he hecho cursos de todo tipo y he obtenido títulos federativos en Wushu, lo que me permitió ser Maestro y árbitro nacional. Aquí, la motivación no era solo aprender, sino no depender de nadie para validar mis grados.

El gran salto

En 2023 decidí dar un giro a mi vida. Después de 27 años como vigilante de seguridad, un trabajo que nunca me gustó y que minaba mi salud mental, (gracias a unos jefes déspotas), me lancé a preparar oposiciones. Aquí fue determinante el apoyo de varias personas, entre ellas familia, compañeros y amigos, no quiero dejar pasar estas líneas para dar gracias infinitas a Ángel Hernández, compañero de Ving Tsun de Lanzarote.
Aprobé, entré en bolsa y ahora trabajo como Gestor de Servicios en la universidad.
Mi amigo Armando me ayudó cuando me dijo: “Aprovecha esta situación para salir de ahí”. Tenía razón.
¿Qué mejor motivación que dar un giro a tu vida?

Del fútbol al Wushu

En lo deportivo he probado de todo: fútbol sala (como portero), atletismo, baloncesto… pero nada me marcó tanto como las artes marciales. 

Con 10 años empecé Kung Fu y estuve 15 años practicando lo que hoy llamo un “pseudo kung fu”. Hubo buenos momentos y grandes compañeros, pero finalmente me "invitaron a dejar el gimnasio, pero esa es otra historia que ya contaré. A partir de ese momento junto con mi compañero René, empecé a entrenar auténtico Taiji y Wushu con constantes viajes a Madrid, aprender el Wushu que venía de China era nuestra motivación, nunca pesaron los viajes a pesar de trabajar los fines de semana de noches para poder asistir a los entrenamientos los sábados por la mañana.

El camino me llevó hasta Pablo Ortega, mi maestro de Sanda, con quien sigo aprendiendo y que ha sabido trasmitirme toda su pasión por este bello deporte de contacto  Hoy, mi motivación como entrenador es ver a mis alumnos superarse. Hemos logrado campeonatos de España, participaciones en Europeos y un próximo Mundial. Para un club modesto como el nuestro, es un sueño hecho realidad.

También llevo 15 años practicando Ving Tsun con Jesús Carballo, otro ejemplo de pasión y búsqueda constante de eficacia que ha sabido transmitirme su pasión y su búsqueda constante de un Ving Tsun efectivo.

Competir… por mis alumnos

Mi motivación en la competición nunca ha sido la gloria personal, sino servir de ejemplo. Es más fácil darlo todo cuando tienes un maestro guiándote que cuando eres tú el que guía, el camino no ha sido fácil pero ha merecido la pena.

Y entonces… a correr

Hace dos meses me dio por salir a correr. Ritmo lento, 6 o 7´el km, música de Rock FM y mucha pereza. Hasta que en Cádiz, dos chavales me adelantaron. Decidí seguirles. Terminaron desviándose, pero yo continué con un ritmo que no creía posible: 4:13/km durante más de 6 km.
Para un corredor habitual es poca cosa, pero para mí fue una victoria.

¿De dónde viene mi motivación?

A veces solo necesito una chispa: alguien que me rete, una canción que me inspire, un objetivo que parezca fuera de mi alcance.
No siempre tengo ganas, pero cumplo con lo que me propongo, aunque a veces me cueste un mundo. Creo que el éxito llega cuando pones tu vida en lo que te motiva, eres constante, te rodeas de gente positiva y aceptas que el camino es tan valioso como la meta.

“No hay progreso sin constancia, ni victoria sin paciencia. La motivación es la primera chispa; la disciplina es el fuego que mantiene viva la llama”

Cada persona debe plantearse unos objetivos y encontrar la motivación que le lleve a alcanzarlos, sabiendo que puede que no llegue a la meta… pero que el aprendizaje del camino ya es un triunfo.
En las artes marciales, como en la vida, no se trata solo de ganar, sino de seguir caminando, un paso más allá cada día.




domingo, 3 de agosto de 2025

HABILIDADES DE UN PELEADOR DE SANDA

Las artes marciales requieren de una serie de habilidades que todo buen practicante debería cultivar, el Sanda como deporte de contacto derivado de las artes marciales tradicionales chinas no es ajeno a esta máxima. Entre las habilidades a trabajar por parte de un deportista de esta disciplina destacan las 7 siguientes:

1. Trabajo de pies y movilidad – esencial para entrar y salir rápido de la distancia de combate, entrar a la proyección, cambiar el ángulo o salir de la línea de ataque. De suma importancia trabajar la velocidad, la estructura y el equilibrio de nuestros desplazamientos.

2. Golpeo (puños y piernas) – técnica de puños y patadas, como combinar éstas. El Sanda deriva de las artes marciales tradicionales chinas y por lo tanto tiene sus peculiaridades con respecto a otros deportes de contacto, como puños con vuelta, boleas o patadas con la pierna adelantada. Conservar la esencia del Wushu enriquece el arsenal de movimientos y diferencia el Sanda de otros deportes de contacto.

3. Proyecciones y derribos – una parte clave en esta disciplina. Desarrollar la habilidad de entrar rápido, hacer transiciones de una proyección a otra o ser capaz de definir la proyección sin forcejear con el contrincante son esenciales para ser eficientes en el uso de esta parte del arsenal de combate. La mayoría de proyecciones tienen su origen Shuai Jiao u otros estilos tradicionales de Wushu, aunque puedes utilizar cualquier proyección derivada de otros deportes de contacto o artes marciales siempre que cumplan con el requisito de no tener más de dos apoyos en el suelo, por lo tanto si quieres ser un luchador efectivo en este área deberías conocer y estudiar todo tipo de proyecciones que puedas adaptar al combate en Sanda con la premisa siempre presente de que que se utilizan guantes de boxeo en los combates.

4. Defensa y bloqueos – cubrirse de patadas y puñetazos y saber bloquear las proyecciones. Emplear la fuerza adecuada, como suelo repetir a mis alumnos, no matar moscas a cañonazos. Integrar las esquivas en nuestro sistema defensivo  es importante para evitar el contacto, además, en la distancia corta nos ayuda a utilizar esa esquiva como entrada a la proyección. Por otro lado, el trabajo de defensa y ataque simultáneo nos dará ventaja sobre nuestro adversario. En cuanto a los bloqueos de la proyección nos debe servir además para trabajar la contra e intentar derribar a nuestro oponente, en este sentido intensificar el trabajo de estructura en estático y en movimiento.

5. Condición física y explosividad – resistencia y fuerza para mantener intensidad. Ser capaz de llegar a un tercer asalto manteniendo estas capacidades físicas en lo alto. A lo largo de estos años como entrenador he visto muchos combates donde se fuerza un tercer asalto y en estos la preparación física ha sido determinante en el desenlace del combate. Haz una preparación específica para tu deporte.

6. Tiempo, distancia y anticipación – saber cuándo atacar, esquivar o derribar. Ser capaz de ver los errores del contrario y utilizarlos en tu beneficio. Golpear antes,durante y después del ataque del adversario. Trabajar la velocidad de reacción es vital tanto para el ataque como para la defensa. Otro aspecto importante son los cambios de ritmo, la velocidad y la explosividad son fundamentales, trabájalas a conciencia y específicamente.

7. Actitud correcta – caracterizada por la determinación, la resiliencia, el control emocional y la capacidad de concentración, incluso bajo presión. Este quizá sea uno de los aspectos menos trabajados por los deportistas no profesionales, implica la ayuda de profesionales de la psicología deportiva y no  todo el mundo tiene acceso a ellos/as. Aún así, hoy día hay muchas herramientas que pueden ayudarte en este sentido, no desdeñar esta parte de tu entrenamiento ni la posibilidad de consultar un profesional.

"La técnica sin actitud está vacía. El poder y la potencia sin control no sirven de nada. El Sanda es un deporte de contacto donde se busca el equilibrio entre agresividad, precisión y el control mental".